Lo sabemos, eso de “acuchillar” suena un poco violento. Pero cuando se trata del parquet es también una necesidad para su correcto mantenimiento. De hecho, hay profesionales que se dedican a ello y que lo hacen con auténtica maestría para conseguir que tu suelo luzca como el primer día. No olvidemos que la madera es un elemento natural y, como sucede con nuestra piel, ella también necesita renovarse. Te contamos todo acerca de acuchillar el parquet: cuánto cuesta y cómo hacerlo tú mismo si no quieres gastar tu presupuesto.
Cuándo se debe acuchillar el parquet
Hemos dicho anteriormente que acuchillar el parquet es fundamental para que se mantenga en óptimas condiciones. Ahora bien, esto no se aplica en todos los casos, sino tan solo en aquellos suelos que son de madera maciza como el nogal, el cedro, el roble o el pino. Estas maderas son de calidad y pueden ser trabajadas al tiempo que merece la pena invertir para que dure el mayor tiempo posible como nuevas. Es la ventaja que tienen.
Tampoco hay que pasarse, pues conviene acuchillar el suelo cada 8 o 10 años. Se hace para reparar las imperfecciones que haya podido sufrir la madera y tan habituales del uso como, por ejemplo, arañazos, cambios de color debido al sol, golpes e incluso puede borrar manchas de humedad.
Posteriormente al acuchillado viene el barnizado para proteger la madera y embellecerla dándole brillo. La apariencia de un viejo suelo de madera mejora visiblemente tras un buen tratamiento de reparación.
Cuánto cuesta acuchillar el parquet
Depende de la empresa a la que se lo encargues y de los materiales utilizados, aunque el precio por metro cuadrado para acuchillar el parquet suele oscilar de media entre los 14 y los 20 euros. No es una regla fija, sino que hay que sumar determinados factores como son los productos a utilizar y el estado en el cual se encuentre el suelo. Digamos que, por términos generales, una vivienda de 80 metros cuadrados por salirte por cerca de 1000 euros.
Cómo puedes acuchillar el parquet tú mismo
¿Decidido a acuchillar el parquet tú mismo?¡Manos a la obra! El primer paso es lijar la superficie. Para ello hazte con una lijadora eléctrica. Comienza con una lija de grano grueso y culmina con una de grano fino. Elimina todo el barniz. Antes de proceder, protege todo cuanto no quieras estropear, como los rodapiés y la pintura de la pared.
Una vez lijado, hay que limpiar el polvo que ha salido y dejar la superficie limpia. Pule de nuevo con la lija fina en una rápida pasada y vuelve a limpiar.
Posteriormente pasamos a la imprimación. Marca con cinta de pintor los límites. Aplica la capa de imprimación con una brocha plana y generosamente. Dale una mano en sentido contrario a las vetas y, seguido, otra mano en sentido a favor de estas.
Cuando toda la imprimación haya secado, lija y limpia todo, dándole finalmente con una bayeta húmeda. Solo nos quedaría proceder a barnizar, para lo cual repetiremos el procedimiento: una mano en sentido contrario a las vetas de madera y otra en sentido a favor. A secar y ¡listo!
Aprende cómo limpiar correctamente la tarima flotante:
Galería de imágenes Acuchillar el parquet: cuánto cuesta y cómo hacerlo tú mismo
